vendredi, avril 17, 2009

Historia para McCaisy (I)

El muchacho se llamaba Forastero. Y justamente para él, habia un mensaje en el diario del viejo Jandro. Sabia que tendria que seguir los pasos del viejo Jandro si queria conseguir la llave flamente de la eterna inspiracion.

Entre algunas paginas, algunas dibujos, mapas y simbolos que no alcanzaba a comprender, Forastero comenzo a leer con atencion.

El nombre del diario del viejo Jandro estaba escrito en tres lenguas extranias. Se leia "Journey du p3z". En una de sus ultimas paginas contaba la historia de cuando el viejo Jandro llego a aquel valle. Ese pueblo, antes de la llegada de los altos seniores que venian del otro lado de los Alpes y los Pirineos, todavia se llamaba Nobles. Y con el tiempo, en aquel espacio rodeado de montanias, comenzaron a suceder cosas extranias, cosas que seguramente venian del otro lado de las montanias. En ese momento, aquel pueblo adquirio otra cara y como era una ciudad de mucho transito y muchos viajeros, comenzo a hablarse de la ciudad de de los Grandes Seniores, des GrendsNobles: Grenoble. Pero esa historia sera contada a profundidad en otra ocasion.

En esas ultimas paginas del diario del Viejo se contaba la ocasion de cuando llego ahi por primera vez. Cuando, para no perderse, siguio las lineas del tranvia (que era una de las invenciones traidas por los grandes seniores), y dio con una Boulangerie y pudo comprar el primer trozo de pan que comeria en dias y que pensaba llevar a la casa Maffioletti, la casa donde le habian dicho que lo estarian esperando. Al saludo de la persona que almacenaba el pan, Jandro respondio, utilizando el poco dialecto que habia aprendido en el camino y con esfuerzo pronuncio: "An baguet silvuplé". Pago con una pieza de 2 mathoms (como se llamaba la moneda en aquel entonces)porque estaba seguro que seria suficiente. Espero el cambio y se fue.

Cuando llego a la casa Maffioletti, descubrio que la casa estaba abandonada. Esa casa, solia ser de Tarco Maffioletti, un gitano que habia venido en la primera oleada invasora desde tierras corsegas. El anciano hablaba Latin y era delgado como un fideo. Sin embargo, el viejo Jandro, guardo el pan aunque moria de hambre y decidio esperar. Confiaba en la palabra que el mensajero le habia dicho antes de partir hacia Grenoble: "Tendras noticias cuando sea el momento, manten la calma y la fe firme".

En un pequeno pasillo que se extendia desde la puerta hacia la calle, Jandro aguardo la noche. Sin dormir, por el hambre, por el frio y por la incertidumbre. Sabia que al dia siguiente tendria noticias.
El iria a buscarlas a la Taberna Ciberestelar en la Rue Guétal (otra novedad de los Altos seniores), una vez hubiera despuntado el alba. Ahi, tal y como le habia dicho el mensajero, podria hablar el dialecto saxon que habia aprendido junto a su padre muchos anios atras, entre los campos de peras y lagos de flechas rotas (broken arrow). (Continuara)

1 commentaire:

  1. Anonyme3:11 AM

    Alexandre. Ce message se lit comme si je suis sur mon chemin vers la terre des grands seigneurs. La Cruz de Santiago, le gardien de l'ancien espion, moi, tout fonctionne. Les ennemis ne peuvent pas retracer les étapes de cette Forastero, ont l'assurance. Mon seul souci est la météo, nous espérons qu'il ne cause pas de retard.
    Par le chemin, regardez, M. Alexander, dans son courrier dans la boîte aux lettres de poissons des Caraïbes, un message rédigé par le greffier Gabriel. J'ai envoyé un avenant à cette cyber charte pour savoir si elle aurait un intercepter moi. Cependant, je sais que c'est juste une précaution, pas de véritable raison pour laquelle il travaille. Vous verrez.
    A bientôt, M. Alexandre. Le grand jour est arrivé.
    McCaisy.

    RépondreSupprimer